Las gafas son un
complemento indispensable para nuestro look, pero lo más importante es proteger
nuestros ojos del sol. Yo tengo los ojos azules y la verdad, son mucho más
sensibles al sol que los ojos oscuros, hasta el punto que cuando estoy en la
playa me tengo que bañar con las gafas de sol para protegerme. ¿Pero todas las
gafas nos protegen igual? No.
No necesariamente
protegen más los cristales oscuros que los transparentes, lo importante es que
tenga una protección suficiente contra los rayos del sol y para eso hay que
mirar el filtro solar del cristal.
¿Cómo puedo saber que
el cristal es de calidad?
Debemos fijarnos que lleven
inscriptas las letras CE y el nivel de protección, que es de 0 a 4.
Hay dos
tipos de cristales filtrantes:
Los minerales, se rayan poco pero son mucho más sensibles a los golpes.
Los orgánicos, son ligeros y resistentes a los golpes.
Ambos pueden recibir
tratamientos, como el antirreflejo y el fotocromático, significa que el cristal se oscurece
con la luz.
Los niveles de protección son del 0
al 4. Para uso cotidiano el nivel 3 es suficiente, pero para la montaña se
aconseja un nivel 4, este nivel no debe utilizarse para conducir.
¿Qué gafa de sol me
favorece más?
Todo complemento tiene mucha importancia, sobre todo si somos de las que
nos gusta ir a la moda. La elección de las gafas de sol nos permite definir
nuestro propio estilo, pero dentro del mismo tenemos que saber cuál es el que
nos favorece más.
Para las caras con forma redonda, se puede elegir entre acentuarla
con gafas redondas o suavizarla con un marco de forma
geométrica, angulosa o estirada.
Para las caras cuadradas, la acentuación se
consigue con las formas geométricas y la corrección con formas
ovaladas.
En cuanto a los rostros rectangulares, las gafas ovaladas permiten
alargar la cara.
Para las caras ovaladas cualquier forma le quedan bien.
Nunca compréis unas gafas que no cubran vuestras cejas, no favorece nada.
¿Qué montura elegir?
Hay tres tipos de
montura de gafas: de pasta, metal y al aire estas últimas son para las gafas
graduada, ya que dan sensación de no llevar nada.
Inconvenientes:
Monturas de pasta: son
más fáciles de romper que las de metal y se deterioran antes.
Monturas de metal: si
no les das un uso adecuado se pueden deformar.
Monturas metal con
memoria: Recupera la forma de la montura incluso después de doblarlas y
aplastarlas. Esta es ideal para los más descuidados que siempre olvidan donde las dejan y acaban sentándose encima de
ellas.
Monturas de fibra de
carbono: pesan poco y son muy resistentes. Ray Ban es una de las firmas que
trabaja con este material.
Como todo en la moda, hay que dejar al margen
lo que se lleva, para pensar en lo que más nos favorece y lo que más cómodo va a
ser para nosotros.
Dependiendo de la
estructura de tus huesos, fina o gruesa, deberás buscar la montura que mejor
compense tus rasgos más acentuados. Por eso cuando vayas a comprar una gafas
tomate el tiempo que necesites, pruébate muchos modelos y deja que te asesore
un profesional.